Un reciente avistamiento de leopardo en el sur de Camerún ha revitalizado los esfuerzos para conservar la menguante vida silvestre de la región, y los investigadores han descubierto la primera evidencia de este esquivo gran felino en más de dos décadas.
Un regreso a las áreas de distribución anteriores Los ecologistas han tratado durante mucho tiempo de documentar especies que se cree que se han perdido de sus áreas de distribución históricas.
Éxitos recientes, como el redescubrimiento de los gorilas de las tierras bajas en Guinea Ecuatorial y los cerdos Babirusa en la isla Buru, Indonesia, han demostrado la importancia de las herramientas modernas de conservación como las cámaras trampa.
Estos dispositivos, activados por el movimiento, capturan imágenes de animales y proporcionan datos invaluables sobre su presencia y comportamiento.
Redescubriendo el leopardo africano En 2019, los investigadores instalaron 19 cámaras trampa en el sur de Camerún para estudiar la ecología de los elefantes del bosque en peligro de extinción.
Sorprendentemente, capturaron una imagen poco común de un leopardo adulto en el área del Parque Nacional Campo-Ma’an, lo que marcó el primer avistamiento documentado en 20 años.
Aunque solo se fotografió un leopardo, su presencia es una señal сгᴜсіаɩ de que los leopardos aún podrían habitar la región, posiblemente sirviendo como el principal depredador.
Desafíos para la conservación Los leopardos tienen una amplia distribución en África y tienen la capacidad de adaptarse a diversos entornos, desde sabanas hasta selvas tropicales.
Sin embargo, se cree que su número está disminuyendo debido a la pérdida de hábitat, la caza ilegal y la invasión humana.
Un estudio de 2016 indicó que el área de distribución del leopardo africano se ha reducido al 67% de su extensión histórica, y que las poblaciones en la cuenca del Congo, que alguna vez se consideró un bastión, ahora se han reducido significativamente.
Futuros esfuerzos de conservación en Campo-Ma’ann El avistamiento sorpresa ha impulsado nuevas iniciativas de conservación en el área de Campo-Ma’ann.
Con el apoyo de la comunidad local y el Ministerio de Silvicultura y Vida Silvestre de Camerún, los investigadores pretenden ampliar sus esfuerzos con cámaras trampa para comprender mejor el uso del hábitat del leopardo.
Estos datos guiaráп las futuras estrategias de conservación y ayudaráп a mitigar los conflictos entre humanos y leopardos, que han aumentado debido al aumento de los asentamientos humanos y la deforestación.
El Parque Nacional Campo-Ma’an, que abarca 2.680 kilómetros cuadrados, forma parte de la cuenca del Congo, la segunda selva tropical más grande del mundo.
El área alberga muchas especies, incluidas especies en peligro de extinción, como el gorila de las tierras bajas occidentales, el elefante del bosque y el chimpancé.
Sin embargo, también enfrenta una importante presión humana proveniente de la tala y las plantaciones de palma aceitera, lo que representa graves amenazas para la vida silvestre de la región.
Los investigadores creen que un seguimiento sostenido y una estrategia de conservación a largo plazo seráп cruciales para garantizar la supervivencia de los leopardos y otras especies en peligro de extinción en Campo-Ma’an.
Dada la proximidad del parque a más de 100 asentamientos humanos, es urgente realizar esfuerzos continuos para proteger su biodiversidad.